Hacienda continúa intensificando sus medidas fiscales con especial atención a los trabajadores autónomos y PYMEs. A través del Plan Estratégico de la Agencia Tributaria 2024-2027, se reforzarán las acciones diseñadas para prevenir prácticas fraudulentas en la economía sumergida, que representan una preocupación constante para las finanzas del Estado.
Vigilancia del uso del efectivo
Para lograr estos objetivos, la Agencia Tributaria (AEAT) está realizando un exhaustivo seguimiento del uso del efectivo. Este control se volvió más estricto en 2021, cuando se redujo el límite de pago en efectivo de 2.500 euros a 1.000 euros. Este tipo de medidas no son casuales; son parte de un esfuerzo mayor para prevenir el fraude fiscal. En particular, la AEAT ha puesto el foco en los profesionales que no ofrecen a sus clientes opciones de pago como tarjeta de crédito, débito, transferencia bancaria o bizum. Adoptar estos métodos podría facilitar el seguimiento de los ingresos reales de autónomos y pequeñas empresas.
Control de rentas directas al consumidor
Además de supervisar los medios de pago, Hacienda estará atenta a los profesionales que obtienen sus ingresos de bienes o servicios dirigidos directamente al consumidor final. Esto se debe a que este tipo de transacciones a menudo presentan un mayor riesgo de evasión fiscal. También serán investigados aquellos signos externos de riqueza, patrimonio o rentabilidad que resulten incoherentes con los ingresos que han sido declarados por los contribuyentes.
Actuaciones de control sobre existencias
La AEAT implementará acciones específicas hacia aquellos contribuyentes que manifiesten una evolución irregular o anómala en el importe de sus existencias. Esta situación podría ser indicativa de ventas ocultas, por lo que se prestará especial atención para identificar posibles irregularidades. Según la Resolución del 21 de febrero de 2024 emitida por la Dirección General de la Agencia Estatal de Administración Tributaria, estas actuaciones de control están diseñadas para detectar inconsistencias en la actividad declarada.
Control del uso abusivo de sociedades
Otro ámbito donde Hacienda centrará su atención es en el uso indebido de sociedades unipersonales, patrimoniales o familiares. En algunos casos, estas sociedades son creadas con el único propósito de reducir la carga fiscal del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), en lugar de cumplir su función legítima de facilitar la actividad empresarial. La AEAT tiene la intención de vigilar exhaustivamente las transacciones asociadas a estas sociedades, asegurándose de que no se utilicen como un medio para evadir impuestos. Por ello, se llevará a cabo un seguimiento de las operaciones principales, como la constitución, aumento y reducción de capital, disolución y liquidación, entre otras.
Plataformas alternativas para los pagos virtuales
Un fenómeno moderno que ha surgido son las plataformas de pagos virtuales que operan en España sin una presencia física en el país. Estas entidades pueden funcionar legalmente dentro de Europa, pero no tienen la obligación de proporcionar información detallada sobre los pagos que procesan. Aunque, al momento, estas plataformas no tienen un impacto significativo, desde la AEAT se considera que podrían representar un futuro desafío en la lucha contra el fraude.
A modo de prevención, Hacienda intensificará el control sobre las empresas que utilizan sistemas de pago a través de plataformas que no estén sujetas a las regulaciones de suministro de información sobre pagos. Este enfoque preventivo busca evitar que tales plataformas puedan ser utilizadas como una vía para la evasión fiscal y el fraude.
Refuerzo del control y transparencia
Con todas estas acciones, el objetivo de Hacienda es claro: fortalecer el control y la transparencia en el ámbito fiscal y garantizar que todos los contribuyentes cumplan con sus obligaciones. La colaboración entre autónomos, PYMEs y la Agencia Tributaria es fundamental para crear un ambiente económico justo y equitativo. Mantener la correcta tributación no solo beneficia a las arcas del Estado, sino que también asegura que todos los ciudadanos contribuyan de manera proporcional al desarrollo del país.
En conclusión, el enfoque de Hacienda sobre la fiscalidad y la lucha contra el fraude fiscal está más centrado que nunca en la vigilancia de transacciones. Con un aumento en el control de los pagos en efectivo y la creación de sociedades, la AEAT se propone cerrar cualquier posible brecha en el sistema que permita la evasión de impuestos. Estas medidas están diseñadas no solo para proteger el sistema fiscal, sino también para promover un ambiente empresarial más transparente y equitativo para todos.