En 2025, quienes deseen jubilarse a los 65 años deberán tener cuidado, ya que se incrementarán los requisitos para acceder a este derecho. Si no se logran cumplir, la edad de jubilación ordinaria legal aumentará un año y ocho meses, alcanzando así casi dos años más de espera. Esta medida está contemplada en la Ley 27/2011, que también especifica cómo se incrementará la edad de jubilación hasta 2027 y los métodos para calcular la cuantía de las pensiones de jubilación de la Seguridad Social.
Requisitos para poder cobrar el 100% de la pensión
Es esencial señalar que, aunque se alcance la edad legal de jubilación, esto no garantiza el cobro del 100% de la pensión. Para disfrutar de la pensión completa, la Seguridad Social exige haber cotizado un mínimo de 36 años y 6 meses. Esto permitirá a los jubilados tener acceso al 100% de la base reguladora, la cual debe diferenciarse de la pensión máxima.
El próximo año, la pensión máxima aumentará, superando el crecimiento de otras pensiones. Este incremento se ajustará a la evolución del IPC anual, sumando un aumento adicional del 0,115%. Con esto, la pensión máxima pasará de 3.175 euros mensuales a 3.264 euros mensuales, aplicable tanto para quienes reciban una única pensión como para aquellos que perciban múltiples.
Cotización y cálculo de la pensión
El método de cálculo de las pensiones de jubilación se mantendrá sin cambios respecto a 2024. Para acceder a la pensión contributiva, se requerirá un mínimo de 15 años cotizados, lo que equivale a 5.475 días de trabajo. Con este período, los jubilados tendrán derecho al 50% de la base reguladora. La base se calcula sumando las bases de cotización de los últimos 300 meses previos al hecho causante (25 años) y dividiendo el resultado por 350.
Una vez establecido este cálculo, se aumentará la base reguladora en un 0,21% por cada uno de los primeros 49 meses adicionales. Después, se añadirá un 0,19% por cada mes durante los siguientes 209 meses.
Cambios en otras modalidades de jubilación
Los cambios en la edad de jubilación también impactarán otras modalidades, como la jubilación anticipada o parcial. Por ejemplo, en el caso de la jubilación anticipada voluntaria, que permite adelantar la jubilación hasta 24 meses, la edad mínima será de 64 años y 8 meses. Sin embargo, quienes tengan cotizados al menos 38 años y 3 meses, podrán acceder a la jubilación anticipada a partir de los 63 años.
Para la jubilación anticipada involuntaria o forzosa, que permite adelantar hasta 48 meses, la edad será mínima de 62 años y 6 meses. Aquellos que hayan trabajado un mínimo de 38 años y 3 meses podrán disfrutar de este derecho a los 61 años.
Un panorama cambiante para 2025
En 2025, se mantendrá la edad de jubilación a los 65 años para quienes hayan cotizado un mínimo de 38 años y 3 meses. Sin embargo, si no se cumplen estos requisitos, la edad subirá dos meses, alcanzando los 66 años y 8 meses.
Es importante mencionar que, al mirar hacia adelante, la legislación estipula un aumento anual tanto en la edad de jubilación como en los años de cotización requeridos. Este enfoque gradual responde a la necesidad de equilibrar el sistema de pensiones a largo plazo, garantizando su sostenibilidad.
Consideraciones finales
La Ley 27/2011 ha cambiado profundamente el panorama de la jubilación en España, y con las reglas que entrarán en vigor en 2025, todos los trabajadores deben ser conscientes de las nuevas exigencias. Es crucial informarse adecuadamente y planificar la jubilación con antelación, teniendo en cuenta los años de cotización requeridos y la edad de jubilación que se adapte a cada situación laboral.
El acceso a una jubilación digna depende no solo de alcanzar la edad legal, sino también del tiempo y la calidad de las contribuciones que se hayan realizado a lo largo de la carrera laboral. En este sentido, aconsejamos a los trabajadores que se familiaricen con los detalles de la ley y comiencen a planificar su futuro con tiempo, para no verse sorprendidos en el momento de cambiar su estatus laboral y disfrutar de los beneficios de la jubilación.