Son numerosas las personas que se sienten identificadas con el síndrome del trabajador quemado, que se traduce en un agotamiento físico y mental, estrés, ansiedad, y alteraciones en la alimentación y el sueño. Este fue el escenario que vivió Ella Weston, una joven maestra de Primaria que, en busca de un cambio en su vida laboral, decidió dejar su empleo para emprender su propio negocio.
Un nuevo comienzo en la enseñanza
Residente en Londres, Ella empezó a dar clases en 2021 apenas se graduó, lo cual al principio parecía el sueño de muchos. Sin embargo, pronto se dio cuenta de que aquellas largas horas de trabajo eran “insoportables”, a pesar de su amor por la enseñanza. No obstante, fue en marzo de 2024 cuando tomó la decisión definitiva de dejar su puesto y comenzar a ofrecer clases particulares en un espacio improvisado en su hogar.
Transformación personal y emocional
Los beneficios de este cambio no han sido únicamente económicos, ya que Weston comenta que ahora “el tiempo que he ganado” y la “libertad” son aspectos que valora mucho más. Según sus declaraciones al medio ‘Daily Mail’, “mis mañanas son ahora mucho más lentas, ya no están alimentadas por la adrenalina o las prisas por salir a la calle”.
Esta nueva rutina le permite comenzar el día ayudando a un par de alumnos en casa, mientras que por la tarde, se dedica a dos sesiones grupales donde imparte clases a cuatro niños en cada grupo. Destaca que “preparar estas sesiones es algo que disfruto de verdad, creando lecciones personalizadas y adaptadas a los intereses de los niños”.
La presión del sistema educativo tradicional
Uno de los factores que motivaron a Ella a dar este gran paso fue el carácter rígido de su anterior empleo. Las prolongadas horas de trabajo y el sacrificio constante de su tiempo personal para cumplir con las expectativas crecientes del sistema educativo, la llevaron a una situación de estrés extremo. Ella llegó a gastar su propio dinero para hacer las aulas más acogedoras y se veía obligada a asumir tareas administrativas que no estaban relacionadas con la enseñanza propiamente dicha.
En este sentido, Ella explica que “me resultaba difícil mantener el equilibrio”, y consigna que la acumulación de estrés comenzó a afectar su salud. La ansiedad se intensificó, al punto que su médico la condujo a tomar una baja por hipertensión y la necesidad de reposo.
El éxito de ‘Ella’s Study Spot’
Emprender no es una tarea sencilla, pero en el caso de Ella Weston, su iniciativa está generando buenos resultados. Bajo el nombre de ‘Ella’s Study Spot’, puso en marcha su escuela particular y afirma que “no tardó mucho en despegar”. En pocos meses, sus grupos de enseñanza se estaban llenando, y ella ahora incluso cuenta con una lista de espera de alumnos interesados en su servicio.
La demanda ha sido uno de los factores claves en su éxito. Weston sostiene que muchos niños no pueden seguir el ritmo del sistema educativo estándar, y este tipo de enseñanza personalizada se convierte en un recurso valioso para muchas familias. “Ver lo rápido que ha crecido el negocio y la diferencia que puede hacer una enseñanza centrada y divertida para los estudiantes ha sido muy gratificante”, añade ella.
Un equilibrio entre ingresos y estilo de vida
A pesar de que duplicar su salario ha sido un aspecto sobresaliente de su transformación laboral, Ella también ha tenido que asumir nuevas responsabilidades que antes no consideraba al ser profesora. No obstante, confiesa que esto le ha enseñado a ser “mucho más inteligente con el dinero”, y ahora el ahorro y la inversión se han convertido en sus prioridades.
Adicionalmente, aunque disfruta de una remuneración mayor, Ella menciona que “habría estado dispuesta a sacrificar algunos ingresos por el estilo de vida que tengo ahora”. Asegura que estar en una posición donde ha incrementado sus ingresos y cuenta con más control sobre su tiempo es, en sus palabras, “lo mejor de ambos mundos”. Su actual trabajo no solo no le consume como antes, sino que también se relaciona con “familias encantadoras”, concluyendo que “es una carrera increíble y gratificante, y no la cambiaría por nada”.
Reflexiones finales sobre el cambio laboral
La experiencia de Ella Weston es un claro ejemplo de cómo un cambio profesional puede transformar no solo la economía personal, sino también el bienestar psicológico y emocional. Su historia invita a reflexionar sobre la importancia de buscar un ambiente laboral que no solo respete la salud.
Alternar trabajo y vida personal es fundamental. Ella ha encontrado un equilibrio que le permite disfrutar de su vocación sin renunciar a su salud ni a su calidad de vida. La búsqueda del bienestar en el ámbito laboral es una necesidad que cada vez más personas están dispuestas a priorizar, y la historia de Weston puede servir de inspiración para aquellos que se preguntan si un cambio puede ser la clave para una vida más satisfactoria.