Hoy, 4 de febrero, se celebra el Día Mundial Contra el Cáncer. En un contexto donde el cáncer se erige como una de las principales causas de morbi-mortalidad en España, es crucial examinar la magnitud de su incidencia y el impacto en el entorno laboral. Según la Red Española de Registros de Cáncer (REDECAN), se prevé que para 2025 se diagnostiquen aproximadamente 296.103 casos de cáncer en el país, lo que representa un ligero aumento respecto al año anterior.
El aumento esperado en la incidencia del cáncer
El informe ‘Las cifras del Cáncer en España’, elaborado por la Sociedad Española de Oncología Médica, proyecta que la incidencia del cáncer en el país superará los 350.000 casos para 2050. Siguiendo con estas proyecciones, los tipos de cáncer más diagnosticados en 2025 se espera que sean el cáncer de colon y recto (44.573 nuevos casos), mama (37.682), pulmón (34.506), próstata (32.188) y vejiga urinaria (22.435). Por otro lado, los linfomas no hodgkinianos y el cáncer de páncreas seguirán siendo preocupantes, con 10.383 y 10.338 nuevos casos respectivamente.
El papel del cáncer en la mortalidad laboral en Europa
Un aspecto que merece atención es que el cáncer se posiciona como la principal causa de mortalidad laboral en la Unión Europea, una problemática destacada por el sindicato UGT. De acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), de los 2,96 millones de fallecimientos anuales en el mundo, 2,6 millones se atribuyen a enfermedades relacionadas con el trabajo, con el cáncer representando el 27,5% de estos casos. La OMS subraya que la exposición a sustancias cancerígenas en el trabajo se clasifica como la cuarta causa de cáncer en la sociedad, solo superada por el tabaco, la dieta poco saludable y el sedentarismo.
Cifras alarmantes sobre muertes laborales por cáncer
Los datos del Marco Estratégico de la UE en materia de Seguridad y Salud en el Trabajo (SST) 2021-2027 revelan que se producen alrededor de 100.000 muertes laborales atribuidas al cáncer cada año. En particular, la exposición al amianto es una de las responsables, con estimaciones que indican que cobra alrededor de 88.000 vidas anuales en Europa.
Seguimiento de la situación en España
En cuanto a España, UGT destaca que el cáncer es la segunda causa de muerte tras las enfermedades del aparato circulatorio. En 2018, se constató que una de cada tres muertes en hombres y una de cada cinco en mujeres fue a causa de tumores malignos, lo que representa más de la cuarta parte de los fallecimientos en el país, de acuerdo con datos del Ministerio de Sanidad.
Reconocimiento limitado como enfermedad profesional
Pese a las cifras alarmantes, el reconocimiento del cáncer como enfermedad profesional en España es escaso. En 2024, solo se reconocieron 106 enfermedades profesionales causadas por agentes cancerígenos, de las cuales 98 fueron en hombres y 8 en mujeres. La mayoría de los casos se debieron a la exposición al amianto y al polvo de sílice libre. Esta situación se torna aún más preocupante si se considera que las condiciones laborales tienen un impacto significativo en la exposición a estas sustancias.
Las microempresas como un factor de riesgo
El sindicato UGT subraya que los trabajadores de microempresas, aquellas con menos de 50 empleados, enfrentan 1,3 veces más probabilidades de estar expuestos a riesgos de cáncer en comparación con sus colegas en empresas medianas o grandes. Esta realidad resalta la necesidad urgente de aplicar medidas de prevención adecuadas en diversos entornos laborales.
Exigencias para mejorar la prevención laboral
Desde UGT, se han realizado exigencias claras para garantizar que las empresas cumplan con las normativas de prevención de riesgos laborales. «Es fundamental evitar la exposición a agentes cancerígenos mediante la sustitución de estas sustancias por alternativas más seguras. Si esto no es viable, debe llevarse a cabo una minuciosa evaluación y control de la exposición laboral,» apuntan. Además, las empresas tienen la responsabilidad de implantar medidas de protección y de proporcionar equipos de protección individual que se adecúen al riesgo y a las características de los trabajadores.
La importancia de la vigilancia de la salud
UGT también ha insistido en la necesidad de realizar un seguimiento periódico del estado de salud de los trabajadores expuestos, para identificar cualquier afectación potencial a su bienestar. Se propone negociar protocolos de retorno al trabajo, asegurando que dichos trabajadores no enfrenten riesgos adicionales a su salud, incluyendo aspectos psicosociales.
Cambio en el concepto de enfermedad profesional
Una de las propuestas clave es modificar el concepto legal de enfermedad profesional. UGT argumenta que muchas enfermedades, incluyendo ciertos tipos de cáncer, tienen un origen multicausal, lo que limita su reconocimiento. «Es esencial abrir el concepto para que una enfermedad se considere profesional si el trabajo es la causa predominante, sin necesidad de que sea la única causa», enfatizan.
Mejora del registro y la notificación de enfermedades
Por último, se demandan actualizaciones en el Listado de Enfermedades Profesionales en España y una mejora en los sistemas de notificación y registro para visibilizar todas las enfermedades profesionales que actualmente permanecen ocultas. UGT hace un llamado a impulsar con determinación la Agenda Nacional para la Prevención del Cáncer de origen profesional, acordada en la Estrategia Española de Seguridad y Salud en el Trabajo 2023-2027. Esta estrategia es crucial para avanzar hacia un entorno laboral más seguro y saludable donde el cáncer no sea una carga silenciosa en la vida de los trabajadores.